Cortar el ajo
Pelar los dientes de ajo

 

Si aplastamos el diente de ajo antes de pelarlo, la piel saldrá más fácilmente.

Podemos aplastarlo ligeramente con la hoja del cuchillo (sin apretar demasiado para que no se rompa), después podremos retirar la piel sin ninguna dificultad.

 

Un truco para que el ajo repita menos es quitar el pequeño tallo que atraviesa su parte central, sobre todo si está verde.

Cortamos el diente de ajo por la mitad como se muestra en la imagen y con la punta del cuchillo retiramos el tallo.

Picar el ajo

 

Apoyamos el diente de ajo en la tabla y con un cuchillo pequeño, muy bien afilado, hacemos 3 o 4 cortes a diferentes alturas, sin llegar hasta el final para que no se separen las láminas.

 

Seguidamente realizamos una serie de cortes longitudinales, sin llegar hasta el final para que no se desmorone.

LO PICAMOS FINITO

Por último, hacemos una serie de cortes transversales, obteniendo el ajo picado.

Nota: Cuando necesites el ajo muy picado puedes pasarlo por un rallador y el resultado será similar. También existen aparatos para picar el ajo que puedes encontrar en tiendas especializadas en utensilios de cocina.

Laminar el ajo

Laminar el ajo es muy sencillo. Colocamos el ajo pelado sobre la tabla y lo cortamos en rodajitas, tan finas como se requiera en la receta, con un cuchillo bien afilado.